{El gato de cheshire}

jo, angie, el hueco de algo tan grande debe de ser verdaderamente difícil de llenar.
aquí va también mi abrazo, para ambas.

Gracias, de verdad.

Pida esa semana, que seguro se merece, y llenen no dos sino cien, doscientos, mil zapatos de arena; hasta los delfines se lo agradecerán. Seguro.

Por cierto, yo también tengo un bichito, pero el mío es muy malo, me hace doler la cabeza, la garganta, estornudar, tener fiebre y andar como anestesiado. No me gusta nada mi bicho, pero él en cambio me debe estar tomando cariño por que no me lo saco de encima desde hace días. Qué cosas.

Gracias Sr. Paseante, intentaré hacer caso en tan acertadas indicaciones.

Siento mucho que esté de esa forma que dice, ahí usted ya me ha tocado la fibra enfermeril...asi que ahi van unos remedios de mi tatatatatarabuela para usted:

Cuando el antibiotico te deja tirado y anestesiado, una sopa muy calentita de jenjibre y salvia y menta fresca, bebida a pequeños sorbos.

No enfadarse con el bicho en cuestión, suele suceder que hay algunos bichos por ahí que les encanta que se enfaden con ellos, les da fuerza y resistencia, así que hablele con cariño, se aburrirá y se irá a otra parte.

Si no le funciona, salga a la calle y entre en la nueva tienda de cosas maravillosas que aún no se había dado cuenta que acababan de inagurar, esa en la que venden cristales de colores, mapas del tesoro en botellas sin precintar, fotos de paises lejanos, libros en arameo y la coleccion entera de los discos de Tom Jones, preguntele a la tendera porque estan los cigarrillos Ideales y las cerezas del Bierzo en aguardiente en el mismo estante, tal vez le diga que como las dejó ahí su abuelo...oh! Pero no acababan de inagurar la tienda?

;-)

Muchas gracias por sus sabios y profesionales consejos. Yo el jenjibre sólo lo usaba para la pasta china, pero veo que es como mi navaja multiusos, que sólo la uso como cortauñas. El bicho parece que ya se ha cansado de guerrear y hemos llegado a una especie de tregua; ahora sólo tengo una voz un poco rara y mocos un poco más raros (que la voz). Lo de la nueva tienda me lo pensaré, porque aun no me siento con fuerzas para enfrentarme con los neo-retratos de Lady Di, las velas antimosquitos con olor a gasolina y los cepillos de dientes con forma de guitarra.